En el arranque de cuartos de final, la liguilla mostró que es otro torneo. Este miércoles el líder del campeonato América, se enfrentó a los Pumas que ocuparon el lugar undécimo del torneo, y pese a la diferencia de 14 puntos en fase regular, las Águilas se encerraron en Ciudad Universitaria y se dieron bien servidas con un empate a cero. Ahora para pasar la ronda, los Pumas tendrán que hacer en la vuelta algo que nadie logró en toda la fase regular: ganarle al América en el Estadio Azteca.

Santiago Solari demostró un planteamiento distinto al de la liguilla anterior, donde en el partido de ida se fue de bruces con su juego abierto y cayó 3-1 ante Pachuca en el Hidalgo. Hoy la precaución primó en el juego azulcrema, y aunque en los últimos minutos pudieron haberse ido con desventaja al Azteca, la misión de salir sin gol en contra dio sus frutos. Por su parte, Andrés Lillini buscó repetir esa dosis de intensidad y protagonismo que tuvo ante Toluca en la repesca, pero su juego fue ensuciado totalmente por la intención americanista de frenarles velocidad a los locales.

El partido arrancó con un América muy compacto, jugando con la línea defensiva y de volantes muy cerca para eliminar espacios de ataque para Pumas. Los felinos fueron a buscar el juego, con la intención de recuperar el balón y desplegar con esa velocidad que les ha caracterizado en últimas fechas.

Los universitarios tenían más intensidad, ganaban los rebotes y jugaban en la cancha de la visita. Sin embargo, el juego se jugaba al ritmo que América buscaba: cansino, y sin oportunidades en el arco. Así, con el trabajo defensivo americanista fue hasta el minuto 39 que llegó un disparo dentro de los tres palos defendidos por Guillermo Ochoa. Tras una combinación felina, el balón quedó votando fuera del área pero el disparo fue controlado con facilidad por el arquero mundialista.

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Apenas un minuto después llegó la primera aproximación americanista. Tras recuperar el balón en defensa, los Pumas se equivocaron al intentar regresar el balón al arquero y quedar corto; Viñas aprovechó para ganar en carrera la esférica, y su disparo raso fue atajado con alguna complicación por Talavera, quien rechazó con el hombro por un bote extraño.

Para el segundo tiempo la tónica continuó. Fue así que las acciones también escasearon pese a la intención de Pumas de ofender. Fue al 76 que América tuvo la más clara para sus intenciones. Richard Sánchez disparó llegando al área tras un contragolpe, y la esférica rozó el poste izquierdo de Alfredo Talavera.

Fue al 82 que los auriazules tuvieron las más clara. Un balón largo fue peinado para que Militao recibiera solo y encarara a Ochoa para disparar al fondo de las redes. Sin embargo, el tanto no fue valido por un fuera de juego al momento del pase de cabeza.

Fue al 92 que Fabio Álvarez pudo hacer un Estadio Universitario lleno, cuya afición esperaba un gol con ansias. Tras otro balón largo, recibió el esférico botando dentro del área, y al intentar rematar de cara al arco, disparo levemente con parte externa para superar al arquero, pero su intento salió desviado de la base del poste por centímetros.

Así, el partido culminó con el empate a cero con toda la acción por vivir el próximo sábado en el Estadio Azteca en el juego de vuelta. Un empate permitiría pasar a los azulcrema, pero de repetir la fórmula de priorizar la defensa los Pumas podrían tener una oportunidad para adelantar en últimos minutos, tal como casi lo consiguen hoy en CU. Sin embargo, los Felinos tendrán que hacer algo que nadie logró este semestre: ganar en el Azteca. La moneda sigue en el aire.

Con información de El Universal

Redacción Club Deportes

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