La selección de Brasil cinco veces campeona del mundo y uno de los grandes candidatos a luchar por el título debutó este lunes en Copa América con un pálido empate sin goles ante una aguerrida selección de Costa Rica, sostenida por su defensa y los buenos reflejos del portero Patrick Sequeira.
Desde el inicio del partido Brasil tuvo el control absoluto, dominando las acciones y generando varias opciones de gol que no pudo concretar debido a que Rodrygo, Vinicius Junior y Lucas Paquetá mandaron desviados sus remates.
La primera opción más clara de gol la tuvo a los 11 minutos con un disparo de Rodrygo dentro del área que salió muy cerca del poste derecho de la portería defendida por Patrick Sequeira.
Marquinhos fue el autor del tanto que abrió el marcador, pero el VAR decidió que no era válido por un fuera de lugar.
La polémica apareció a los 38 minutos cuando un centro de Lucas Paquetá se estrelló en la mano del defensor costarricense Juan Pablo Vargas dentro del área chica, pero el árbitro, auxiliado por el VAR determinó que no había penal, lo que desató fuertes reclamos de los jugadores brasileños.
Brasil continuó presionando al ataque, pero fue hasta los 63 minutos que nuevamente puso en peligro la portería de Costa Rica con un lejano y potente disparo de Paquetá que por fortuna de los centroamericanos pegó en el poste izquierdo.
Los dirigidos por Dorival Junior estuvieron nuevamente cerca de conseguir el gol al minuto 72 en una jugada donde el defensa Haxzel Quiróz iba anotar autogol al desviar con la cabeza un centro, afortunadamente el portero Sequeira evitó el tanto.
El arquero de Costa Rica sin duda fue el gran protagonista de la noche, volvió a salvar su portería a tan solo 10 minutos del final cuando desvió un peligroso disparo de Guilherme Arana. Al final del partido, los jugadores centroamericanos celebraron el empate como si fuera un triunfo, mientras que Brasil salió cabizbajo e inconforme con el resultado.
