Como no podía ser de otra manera, Pep Guardiola volvió a innovar conceptos con su Manchester City en el intenso empate contra el Real Madrid en el Bernabéu (3-3). El técnico se vio obligado a hacer variaciones después de descartar la presencia de Kevin de Bruyne por problemas estomacales, un nuevo invento que demuestra la variabilidad táctica de un equipo que parece prácticamente invencible.
La ausencia de Kevin de Bruyne trastocó todos los planes de Guardiola en las horas previas al crucial partido de Champions. La estrella belga no se encontraba en disposición de disputar el encuentro contra el Real Madrid, un varapalo mayúsculo que el técnico de Sampedor tuvo que remediar con un nuevo invento en su esquema inicial.
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El Manchester City es un equipo cambiante como pocos. Las alternativas de las que dispone, motivadas en gran parte por la cantidad de jugadores de talento que aglutina en todas las líneas del campo, permite a Guardiola poder trastocar sus planes sin que el equipo pierda su esencia por ello.
Con información de Sport.
