El Clásico estaba a la vuelta de la esquina, a Tigres le costó más de lo pensado, pero tiene a André-Pierre Gignac y Nahuel Guzmán en el arco y eso siempre significa una ventaja extra. El francés metió un golazo, rescató el empate y el Patón se encargó del resto en los penales. Fue 1-1 en los 90’ y 5-3 en penales. Hay Clásico y será en Houston.
Los referentes volvieron a salvar a este equipo, que no necesitó jugar un buen partido para sacarse de encima a un rival complicado como el Vancouver. El trámite no fue una papita ni mucho menos, porque arrancó perdiendo y tuvo que esperar hasta que su goleador se invente una genialidad para empatar la cuestión.
Siboldi prefirió darles minutos a los que no venían jugando y eso le quitó peligro a un Tigres que nunca estuvo cómodo en el encuentro. Sin embargo, cuando te sobra jerarquía, las cosas son más sencillas y es más fácil conseguir un pase a 8vos de Final. Allí lo esperaba Rayados, que ya había sufrido también, pero vencido a Portland por 1-0.
