A pocos días de iniciar la Copa Oro, la Selección Mexicana estableció su campamento en Houston con miras a iniciar su participación el próximo 25 de junio. Para encarar el torneo, el entrenador interino Jaime Lozano, ya llegó a la sede temporal del equipo para tomar el timón de un barco que ha estado en aguas turbulentas desde hace tiempo.
Su arribo se dio en silencio, con presencia de medios que esperaban tener alguna declaración o gesto, pero solo encontraron silencio, a diferencia de algunos afortunados aficionados, quienes consiguieron fotos y saludos de su parte, así como algunas muestras de apoyo.
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Mundo Deportivo señaló que esas acciones se debieron a las órdenes estrictas de no hacer declaraciones ante su llegada, por lo que las cuentas oficiales del equipo, se limitaron a subir un video de su llegada al hotel de concentración, luego de un largo viaje desde Guadalajara, donde sí tuvo la oportunidad de hacer declaraciones.
Los integrantes de su cuerpo técnico llegaron para instalarse unas horas antes, a la espera de estar todos para poder planear los pasos a seguir.
