Cristiano Ronaldo logró en este partido dos objetivos, el primero de ellos darle la victoria al Manchester United contra el Brighton & Hove Albion por 2-0, y romper su racha de seis juegos sin marcar al anotar uno de los goles.
El portugués terminó su peor racha goleadora en 13 años en otro mal partido del United, pero en el que los errores atrás del Brighton propiciaron que los tres puntos se quedaran en Old Trafford.
Una vez más, David De Gea se encargó de que todo esto fuera posible con varias intervenciones salvadoras en una primera parte discreta de ambos equipos y en la que la más clara la tuvo Jadon Sancho frente a Robert Sánchez.
El inglés, tras un taconazo de Cristiano, se encontró con un paradón del portero español.
En la segunda mitad llegó el carrusel de errores de los de Graham Potter que les costó el encuentro. Yves Bissouma, uno de los pretendidos por media Premier, se durmió en los laureles, Scott McTominay le robó la pelota y se la dio rápido a Cristiano. El luso, en dos toques, se plantó en la frontal, se fue de uno y la clavó junto al palo.
Golazo para Cristiano, que se lanzó de rodillas al suelo y celebró su décimo quinto tanto esta campaña, el noveno en la Premier, muy lejos de los 16 de Mohamed Salah en la carrera por la Bota de Oro.
Se le puso más de cara aún el encuentro al United cuando Lewis Dunk se despistó en la salida de balón y derribó a Anthony Elanga, que le había robado la cartera. El árbitro, de primeras, solo le sacó amarilla, pero el VAR revisó que era el último defensor y le mandó a la calle.
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Los de Ralf Rangnick jugaron 35 minutos con uno más y disfrutaron de oportunidades para cerrar el encuentro, pero Sánchez estuvo inmenso. Le sacó un cabezazo a bocajarro a Cristiano y un mano a mano a Bruno Fernandes. Y solo pudo ver cómo Cristiano perdió la oportunidad de lograr un doblete cuando un remate de cabeza a un metro de la portería se le marchó rozando el palo.
De tanto perdonar, se pudieron meter en un lío y el Brighton, con un disparo de Jakub Moder, estrelló una pelota en el larguero a 10 minutos del final. Ni con uno más tuvo un final tranquilo el United, que terminó pidiendo la hora, y que en el último suspiro, con el tiempo cumplido, se encontró con una contra que culminó Bruno Fernandes dejando en el suelo a Sánchez.
La victoria mete al United en puestos de Champions y se queda cuarto, con 43 puntos, dos más que el West Ham United, que es quinto.
