Los estadios del futbol mexicano cada vez reciben más público… Y la violencia ha regresado.
Este miércoles por la tarde, al término del partido en el que los Tigres golearon al Atlético de San Luis en el estadio Alfonso Lastras (3-0), integrantes de grupos de animación de ambos equipos se liaron a golpes, además de que se aventaron piedras y botellas.
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La policía tardó algunos minutos en intervenir y le llevó varios más poder controlar la situación. De hecho, se escucharon sonidos semejantes a detonaciones, lo que generó el caos.
Las autoridades potosinas no confirmaron si fueron cohetones o disparos de armas de fuego.
Lo que sí es un hecho es que varios autobuses con aficionados de los Tigres fueron emboscados en las cercanías del inmueble para agredirlos con diversos proyectiles, lo que generó algunos heridos. El reporte oficial es que ninguno fue de gravedad.
Hasta el cierre de esta edición, las autoridades potosinas no tenían a algún detenido por lo sucedido.
Con información de El Universal
